Ingredientes y procedimientos que nos proponen ricos momentos en familia, con amigos o nuestro enamorado o enamorada.
Pero debo sincerarme, y en esta confesión hablar también por varios cocineros. Los libros de cocina son estéticos, decorativos, coloridos y hasta económicos en la mayoría de los casos. De cualquier viaje, no hay mejor souvenir que una receta de cómo hacer buenas buenas tapas, pasta italiana o unos ricos macarons parisinos.
Pero los usamos muy poco.
Una cantidad importante (y aún creciente) de libros, fascículos, revistas y hasta la Biblia de la Sopa, se acumulan en el estante de arriba de la cafetera. Y no puedo evitar pensar en todas esas recetas que conviven conmigo y nunca llegan a concretarse en un plato.
Desde este nuevo espacio les propongo que hagamos una revisión de esta bibliografía que todos tenemos en casa. Próximo paso: abrir nuestros libros y animarnos a probar nuevas recetas!
Ejemplo:
Este fin de semana tuve invitados a los cuales me propuse agasajar y sorprender. Como ya conocían mis caballitos de batalla, tuve que explorar en mis libros en busca de algo nuevo. La receta salió de un libro fruto de mi último viaje a París:
French Brasserie Cookbook, the heart of french home cooking (Heston Blumenthal, 2011)
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| Crèpes de hongos y estragón con crema al maní |
Como suele suceder, nuestro resultado final nunca iguala a la foto. Pero es justamente la opción de adaptar y adueñarnos de la receta lo que nos acerca a los libros de cocina. Confío en que sorprendí a mis invitados y pasamos una noche distendida, entre risas y por sobre todo, disfrutamos de un nuevo sabor.
Lamentablemente en esta te tengo que dar la razón!! Para los que nos gustan los libros de cocina se convierten en una especie de colección pero las recetas pocas veces salen a la luz! Creo que nos gustan tanto porque combinan diseño, foto, arte, un poco de melancolía, nuevos desafios y promesas de felicidad.
ResponderEliminarDicen que la comida entra por los ojos y por eso creo que el sólo hecho de mirar fotos lindas de recetas, nos satisface un gran porcentaje del ritual de comer... será por eso que nos gustan tanto? como sea, una cocina no es lo mismo con y sin libros!!!!! y la proxima espero invitación para esos crepes!!!!!! jaja besos
Yo creo que una de las funciones principales de la biblioteca gastronómica es la de irnos nutriendo inconscientemente de recetas, ingredientes, combinaciones, cocciones, etc. Es como que un determinado momento se me cruzan dos ingredientes y pienso "ahh esto lo puedo hacer así, como en aquel libro..." o "podría usar como guarnición esa recete que esta en tal revista..."
ResponderEliminarQue buenas reflexiones! Muy ciertas ambas... Se nota que quienes hablan tienen conocimiento de causa, jaja
ResponderEliminarAprovecho para saludar a Marian y Fran, que este sabado avanzaron sobre los crepes sin miedo.